Los perros esos peludos que nos miran con ojitos de “ayúdame” cuando se sienten mal. Si el tuyo anda cabizbajo, con la nariz chorreando y tosiendo como si tuviera un motor viejo en el pecho, lo más probable es que tenga un resfriado. Nada grave en la mayoría de los casos, pero vaya que duele verlos así, ¿no?
Pero ¡tranquilo! Hay formas sencillas, naturales y llenas de amor para aliviar esos molestos síntomas sin correr al veterinario a la primera. Aunque claro, si ves que la cosa se pone fea o el resfriado no se va en unos días, mejor no te la juegues y consulta con el doctor perruno.
Ahora sí, al grano. Aquí van los mejores remedios naturales para el resfriado en perros que le van a caer como anillo al dedo a tu compinche peludo.
1. Vaporcito con eucalipto
Si tu perro respira anda con la nariz más tupida que autopista en hora pico, este truco casero le va a encantar (bueno, a ti más que a él, pero se agradece igual).
Receta natural:
Pon a hervir agua con unas hojitas de eucalipto. Luego, cierra una habitación y deja que tu perro respire ese vapor por unos 10-15 minutos. No lo obligues, que no es sauna, pero sí que lo va a ayudar a destapar esa narizota congestionada.
2. Caldito de pollo
¿Quién se resiste a un buen caldo de pollo? Nadie. Y tu perro, menos. Cuando está resfriado y sin ganas ni de mover la cola, un caldito tibio, sin sal ni condimentos raros, puede ser justo lo que necesita.
Además de calentarlo por dentro, le hidrata, le nutre y le arrulla el alma. Si le metes unas zanahorias y pedacitos de calabaza, ya tienes la receta perfecta para que vuelva a mover la colita de alegría.
3. Una cucharadita de miel
La tos en los perros puede sonar como un auto encendiéndose en invierno. Fea, seca, insistente. Pero una cucharadita de miel pura (sin procesar, ni azúcares añadidos) puede obrar milagros.
Dásela directo o mezclada en un poco de agua. Eso sí, nada de miel para cachorros menores de un año, que su barriguita todavía está tierna.
4. Manzanilla
La manzanilla, esa hierba mágica que lo mismo sirve para el estómago que para los nervios. En este caso, también puede aliviar los ojos llorosos, la ansiedad leve y hasta mejorar la digestión si tu perruno está medio revuelto.
Prepara una infusión, déjala enfriar y ofrecérsela en su tazón. También puedes empapar un algodoncito y pasárselo con cariño por los ojitos si los tiene irritados.
Es como un abrazo en forma de té. ¡Y a veces, eso es justo lo que necesitan!
5. Descanso, abrigo y muchos mimos
Más allá de todo lo demás, lo que más cura es tu compañía. Tu perro necesita una cama calientita, cero corrientes de aire y un ambiente tranquilo para que su cuerpo se ponga las pilas.
Que duerma, sueñe, se recupere Y si le hablas suavecito, le das cariño sin apuro y le pasas la mano por el lomo mientras bosteza, mejor que mejor.
¿Y cuándo preocuparse de verdad?
Aunque los remedios naturales par el resfriado en perros ayudan un montón, hay señales que no se pueden ignorar:
Si tiene fiebre alta (lo notas caliente, con las orejas ardiendo)
Si le sale macote espeso o con color raro
Si no quiere comer ni beber nada
Si apenas se mueve o se esconde
Si lleva más de 4 o 5 días igual
Ahí sí, no lo dudes: agarra las llaves y directo al veterinario. No todos los males se curan con miel y caldito.
El resfriado en perros, aunque suene feo, suele ser pasajero. Con un poco de paciencia, cuidados básicos y estos remedios naturales para el resfriado en perros que huelen a hogar y cariño, tu amigo volverá a brincar, ladrar y darte esos lengüetazos sin aviso.
Porque ellos también necesitan que los cuidemos como a niños peludos, con más ternura que ciencia, y con el corazón dispuesto a curar con solo estar ahí.