🐾 Remedios naturales para la gastroenteritis en perros: cómo bajarle el malestar a tu amigo sin correr a la clínica

 ¿Tu perro anda raro? Carita triste, sin ganas de comer, el estómago haciendo ruidos de tambor desafinado y una diarrea que ni te cuento. Bueno, todo parece indicar gastroenteritis.

Ese enemigo invisible que aparece de repente, se mete en sus entrañas y lo deja apagado, sin chispa. Como si le hubieran desenchufado el alma. Y tu ahí, con el corazón en la garganta, preguntándote qué hacer.


¡Tranquilo! Que no cunda el pánico. Si no es grave, hay cosas remedios naturales para la gastroenteritis en perros , caseras y llenas de cariño que puedes hacer para ayudarlo a salir de ese bache sin poner un pie afuera.

Remedios naturales para la gastroenteritis en perros: cómo bajarle el malestar a tu amigo sin correr a la clínica


🌪️ ¿Qué es la gastroenteritis en perros?

La gastroenteritis canina no es más que una inflamación del estómago y los intestinos. Pero en la vida real, se siente como un torbellino que revuelve hasta el alma del pobre perro.


Y claro, puede tener muchas causas: comió algo podrido, un cambio brusco de comida, bichitos que se le metieron sin invitación, o incluso el estrés de una mudanza o un susto.


Lo común es que venga con vómitos, diarrea (a veces con mucosidad), falta de apetito y esa mirada de "no doy más".


🚨 ¿Cuándo hay que salir de inmediato al veterinario?

Antes de que te emociones con los remedios naturales para la gastroenteritis en perros , ojo al piojo. Hay señales que no se negocian:


Sangre en el vómito o la caca


Diarrea y vómitos que no paran en más de 24 horas


Temperatura por encima de 40 °C


Se queda quieto como estatua o no responde


Es un cachorro, viejito o está enfermo de antes


¿Nada de eso? Bien, sigamos.


🌿 Manos a la obra 5 remedios naturales para la gastroenteritis en perros para aliviarlo

️ Ayuno para que el estómago se tome un descanso

Sí, aunque te parta el alma, lo mejor al principio es no darle comida por 12 a 24 horas. Su pancita necesita respirar, calmarse, limpiarse.


Eso sí, no significa que se quede sin agua. ¡Jamás! Agua fresca, en sorbitos, es su mejor aliada.


Y si es un cachorro o un abuelo de cuatro patas, mejor consultar antes de ayunar.


 1.Agua, calditos y  hidratación nivel experto

La diarrea y los vómitos le roban el agua como si un ladrón invisible se la llevara.


Así que, ofrecéle:


Agua filtrada, varias veces


Caldito de pollo casero, sin sal ni cebolla


Cubitos de hielo para que chupe, si no quiere tomar


Si ni con eso se anima, usa una jeringa (sin aguja, por supuesto) para mojarle el hocico. A veces, un empujoncito hace magia.


 2.Dieta blandita 

Cuando ya se lo vea mejor y el estómago no suene como maraca, es hora de volver a comer. Pero suavecito.


Lo ideal:


Arroz blanco bien cocido


Pollito hervido, sin piel ni condimentos


Puré de zapallo o zanahoria


Un poquito de yogur natural (sin azúcar ni colorantes)


Comidas tibias, en pequeñas porciones, como si le dieras cucharaditas de calma.


️3. Té de manzanilla

La manzanilla es ese abrazo en taza que también funciona en perros. Alivia, relaja, desinflama.


Prepara una infusión suave, déjala enfriar bien y ofrecérsela en cucharaditas o mezclada con su agua. También puedes mojarle el lomo con un pañito empapado en el té. Se va a sentir en un spa perruno.


 4.Probióticos naturales

Después de la tormenta, hay que reconstruir lo que quedó. Y ahí entran los probióticos:


Una cucharadita de yogur natural


Suplementos especiales (consulta cuál)


Un poquito de kéfir si ya lo conoce


Esto le ayuda a que las bacterias buenas vuelvan a su lugar y lo dejen en paz.


5.Tranquilidad, cariño y paciencia

Más allá de lo que le des o no, lo más importante es que estés con él. En silencio o en susurros. Con una mantita liviana, lejos del ruido, el caos o el ventilador apuntándole.


Nada lo va a curar más que tu presencia, tus manos, tu voz. Porque para él, tu eres el mundo entero.


La gastroenteritis no es un paseo por el parque, pero con atención, amor y algunos remedios naturales para la gastroenteritis en perros  que pueden ayudar a  recuperarse sin correr a la clínica al primer susto.


Lo importante es saber cuándo actuar en casa y cuándo buscar ayuda. El equilibrio, como en todo.


Y mientras tanto, vos seguí hay, firme. Porque aunque no lo diga, cada lamido, cada suspiro, cada mirada es su forma de darte las gracias.

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